XIV ESTACIÓN

Te adoramos oh Cristo, y te bendecimos. Pues, por tu santa cruz, redimiste al mundo.

Jesús es depositado en la tumba

(anterior estación...)

Lectura: Marcos 15, 42-47

“(…) 42 Era día de Preparación, es decir, vísperas de sábado. Por eso, al atardecer,

43 José de Arimatea –miembro notable del Sanedrín, que también esperaba el Reino de Dios– tuvo la audacia de presentarse ante Pilato para pedirle el cuerpo de Jesús.

44 Pilato se asombró de que ya hubiera muerto; hizo llamar al centurión y le preguntó si hacía mucho que había muerto.

45 Informado por el centurión, entregó el cadáver a José.

46 Este compró una sábana, bajó el cuerpo de Jesús, lo envolvió en ella y lo depositó en un sepulcro cavado en la roca. Después hizo rodar una piedra a la entrada del sepulcro.

47 María Magdalena y María, la madre de José, miraban dónde lo habían puesto.”

Reflexionemos:
Cuando muere un ser querido, ¿nuestra actitud es acorde a esa esperanza?

Que tu bendición, Señor descienda con abundancia sobre este pueblo, que ha conmemorado la muerte de tu Hijo con la esperanza de su Santa Resurrección; venga el perdón sobre él, concédele tu consuelo, acrecienta su fe, y consolida en él la redención eterna. Por Jesucristo nuestro Señor. Amén.

En el nombre del Padre y del Hijo y del Espíritu Santo. Amén.

Fuentes consultadas
-Textos: extraídos de la Editorial San Pablo, sito en Riobamba 230, Bs. As., Argentina (enero de 2003).
-Imágenes: Vía crucis del Santo Cristo de la Quebrada, en Villa Cristo de la Quebrada (Provincia de San Luis, Argentina). Autora de las fotografías Mirta Prokopiw.
-Obra musical: O Jesu Christ, Mein's Leben Licht (Oh! Jesús Cristo, luz de mi vida)de Johann Sebastian Bach, interpretado por el Coro Pforzheim Motete y la Orquesta Bach bajo la dirección de Rolf Schweizer Pforzheim.